martes, 25 de octubre de 2016

Momentos de éxtasis

Viajar mirando por la ventana, en los asientos individuales.
Viajes largos en tren, del lado de la ventana, por supuesto.
 El chocolate cuando estoy triste,
 El chocolate cuando estoy bien.
Probarme un perfume,
acercar mi muñeca a mi nariz cada dos por tres.
Dormir muy tapada, casi asfixiándome,
dormir en los días fríos,
dormir profundo, dormir la siesta, dormir.
Dibujar los costados de mis hojas,
dibujar hojas enteras.
Dibujar mujeres tristes, dibujar animales.
Sacarme el corpiño después de un día largo,
bañarme con agua muy caliente.
Sentir el olor a lluvia, sentir la lluvia en mi cara.
Sentir la brisa cuando llevo mucho abrigo.
Los días nublados y fríos,
el cielo gris.
Improvisar, cantar sobre mi día, sobre mi angustia.
Escribir un poco para aflojar el peso de esta gran mochila en mi espalda,
el peso de todo el dolor que siento a diario.
Maquillarme de mil maneras.
Leer novelas de terror.
Descubrir nueva música.
Sacarme las zapatillas.
El helado de frambuesa.
Mate cocido.
Lavarme la cara.
La borrachera del viernes, la resaca del sábado.
Los perros gordos, los perros enanos, los perros compañeros.
Estirar mi espalda.
Terminar el día.

lunes, 15 de agosto de 2016

No quedaste seleccionada para la etapa de entrevistas

No me seleccionan.
La vida no me selecciona.
Siento que seleccioné fracasar.
la selección no me favorece.

Fui seleccionada para nacer
sin tener que haber nacido.
"Tus papás no debieron tener hijos"
Me seleccionan pero "no debiste haber sido".

No me seleccionan.
No destaco entre la gente,
Soy una mancha negra,
Soy un perfil poco apropiado.
Soy el vómito de los entrevistadores,
me mastican y me largan como llegué,
Y pasan los meses, y crece mi ansiedad.
Y todo se mueve, pero yo sigo igual.
No me seleccionan,
me estanco en mi mierda.
Sumida en el rechazo,
me hago más chica, desaparezco.
Soy producto de mil rechazos,
de mil intentos y muchos viajes,
Soy un pez en un mar de "no seleccionados",
Luchando cansada, triste.

sábado, 23 de julio de 2016

Sueño 23/7/2016

 Soy miembro de una comunidad de guerreros, soy hija de un guerrero muy conocido entre todos. Nos atacan en nuestro pueblo y tenemos que empacar todo antes de que lleguen más soldados e irnos.
Tenemos una costumbre extraña de alabar a nuestros dioses con malvaviscos, tirándolos al aire y comiéndolos como cerdos.
 Empacamos todas las cosas y caminamos a una ciudad aliada a guarecernos hasta reorganizar nuestras fuerzas. Nos agasajan en una iglesia del pueblo en la que nos juntamos a decir oraciones, pasar el rato y dormir.
 Mi profesora de química del CBC es una PROFESORA DE RELIGIÓN en nuestra comunidad, y nos da la tarea de escribir un deseo para la batalla en un papel y leerlos en conjunto, para subirle la moral a los guerreros.
 Uno de los papeles, escrito en un idioma extraño (asumo que era el idioma que usábamos en mi sueño), decía que anhelaba que fuéramos exterminados en la batalla.
 Me enojo y exijo que la persona que escribió eso de un paso al frente y peleemos, mano a mano, por la gran falta de respeto que ese mensaje representa. Se levanta un hombre con cabeza de araña y comienza a reir, largando un líquido viscoso de su boca, con sus colmillos podridos asomándose. Una de las guerreras, enfurecida, antes de poder hacer nada, toma su hacha y le corta el cuello.

DESPIERTO

martes, 3 de mayo de 2016

¡Que alegría la mía!

Despertar en tu cama,
cubierta en frazadas,
en tu departamento nuevo,
con tu perrito.

Abrir la ventana,
la calle se ve hermosa,
eterna y despampanante,
va a ser un buen día.

Desayunas lo que más te guste,
te sonreís a vos mismo
"¡Que alegría la mía!
¡Hoy es un nuevo día!"

Salís a la calle,
la vida te sonríe,
nada puede salir mal,
y si lo hace no importa.

Hasta que abrís los ojos,
y todo era un sueño,
y sos miserable,
y sos triste.

Vivís de casa en casa,
sin un peso,
en laburos boludos,
llorando por los rincones.

Y sos gorda y triste,
y sos inútil y despreciada,
y abandonada, pisoteada.
Sos todo menos feliz.
(Escrito hace algunas semanas, un sentimiento que me acompaña el día de hoy)

Todos los días miro hacia atrás, me veo ahora, y no entiendo.
No sé por qué pero algunos tenemos un destino un poco más desdichado.
Me di cuenta que el estar desempleada combinado con el abandono de mis padres formó en mi un monstruo que me come de a partes cuando me siento ansiosa o simplemente tuve un mal día.
Hoy estoy triste y me siento una inútil.
Estoy indecisa. Desconozco qué quiero realmente para mi vida.
Me gustaría borrarme del todo, aparecer en otro lado.

Rechazo

Desde chica me inculcaron la idea de que soy poca cosa. De que carezco de importancia. Tambien la preocupación constante por el dinero y el sentimiento de que "estoy más gordita".

 Desde que puedo recordar me veo a mi misma siendo una persona triste. No es que realmente, al conocerme, alguien pueda distinguir esto en mí. Tiendo a ser muy simpática y extrovertida, y en muchos casos me han dicho que "soy la persona más feliz que conocen".

 La realidad es otra muy distinta. Me atormenta un sentimiento de incompetencia, de fracaso. Cada día que me levanto me siento un poco más inútil, y cada error o falla de mi día se convierte en una gran pérdida de autoestima y de esperanza.
 
 Perdí mi primer trabajo estable en julio de 2015. Desde entonces no hago más que intentar buscar otro nuevo, quizás mejor. Doy con empleos que no solo son miserables sino que te hacen sentir realmente mínimo, una mula, una mula estúpida y esclava, poco productiva, con nada que ofrecer, carente de utilidad.
  
 Vengo cumpliendo, quizás por una mala racha o por mi propia negatividad, con "la regla de los cinco días". En cada trabajo que tuve desde mi despido, duro solo ese tiempo, ya sea porque mi cabeza no tolera los malos tratos y el desprecio o porque "no cumplo con las expectativas de la empresa". Si bien sé que todos estos trabajos no son soñados ni mucho menos, me indigna. Me indigna que sólo puedo ser apta para trabajar en estos lugares, para aspirar a dejar de limpiar baños o a vender un abono, cuando sé que puedo hacer tantas cosas y no les doy ningún uso. Y hoy terminé con otra regla de los cinco días...

 Me indigna mi vida, mi  situación, mi "mala racha" o mi incapacidad para ver las cosas de manera "Más positiva". Y me acuerdo que no es todo culpa mía. Que no soy negativa porque quiero, porque me encanta, porque disfruto fracasar en todo. Soy negativa porque me hicieron de esta forma, porque nada de lo que me pasa colabora a ver un futuro brillante o prometedor. Porque cada día de mi vida es un calvario constante tratando de no imaginarme colgando del techo o tirándome por una ventana. Porque vivo para buscar empleos tristes y desear no haber nacido nunca,  porque ni siquiera pudieron decirme que tenerme fue un milagro o una alegría. Porque según me han dicho MIS PADRES JAMÁS DEBIERON SER PADRES, y yo debería ser hoy un bebé más en el limbo, o un deseo, o la nada misma.

Me entristezco, todos los días, porque me siento abandonada por todos lados, por mi familia, por mis amigos, despreciada en los empleos, en las entrevistas, en cada ámbito de mi vida, DESPRECIO.
Inmundicia. 

Mi único consuelo es pensar que, quizás algún día, pueda hacer algo que me gusta y mostrarles el dedo mayor a todos aquellos que causaron estos pequeños baches en mi paso, este dolor tan grande en mi pecho, y este sentimiento de humillación ante el constante rechazo.

miércoles, 23 de marzo de 2016

Sueño 23/03/16

Estoy en África. Estamos con un grupo de gente conocida en un pueblo. Nos conocemos con la gente y nos llevamos muy bien, y me hago especialmente amiga de uno de los chicos que vivían en esa aldea. Conforme voy conociendo a los miembros de esa comunidad, conozco a una señora anciana que me cuenta que este chico con quien yo tan bien me vengo llevando es violado semanalmente por una mujer que cree ser una enviada de Dios para los africanos. Suele realizar sacrificios humanos para rezar.
Un día, esta mujer se lleva a una gran parte del pueblo, incluído mi amigo, a realizar un sacrificio a las orillas de un río "doble" que consiste en dos ríos y una parte de tierra en el centro, para que la gente se arrodille, unos mirando hacia un lado, otros hacia el otro.
Invita a la gente a decir unas oraciones y luego anuncia que el verdadero sacrificio se hará con todos los africanos presentes, con ella encabezando la ceremonia y dando las directivas correspondientes.
Obliga a las personas del pueblo a realizar un ritual "purificador" del río en el que tienen que limpiarlo a fondo, sacando todo lo que encuentren dentro de él. La gente comienza a sacar cadáveres y partes del cuerpo: piernas, torsos mutilados, brazos, cuerpos enteros. Los rostros de sus conocidos comienzan a emerger de las aguas.
Recuerdo el comentario de un hombre tomando en sus manos el cadáver de una chica, mirándola con lágrimas en los ojos: se trataba de la hija más joven de su vecino.
En un momento, la mujer da la orden: los presentes deben sumergirse en el río y acabar con sus vidas.
En algún momento del sueño logré manipularlo para llegar al lugar de los hechos y acabar con la vida de esta mujer (desconozco de qué forma).

sábado, 5 de marzo de 2016

Sueño 05/03/16

Estamos en el medio del campo, Eugenia, Sofía y yo. Hay rejas, por donde miremos hay rejas.
Los árboles están muy distantes y la única luz que conocemos es la del sol cuando atardece.
Nos mantienen cautivas dos hermanos afroamericanos. De sus cuellos cuelgan los cadáveres de sus hermanos gemelos más pequeños, desnutridos e inertes, como si fueran bufandas. Los llevan colgando como una humillación, por ser los más débiles y los más jóvenes.
Pedimos clemencia, rogamos por nuestra liberación, somos ignoradas.
Planeamos un escape.
Corremos hasta que nos arden las piernas pero nos alcanzan.
Intentamos una, dos, tres veces, pero ellos siempre nos alcanzan. Y simplemente nos dejan aprisionadas, esperando que pasen los días.
Y en mi último intento de escapar, miro el cielo, y veo el sol muy de cerca, y está atardeciendo de nuevo.

Y despierto.

lunes, 29 de febrero de 2016

Sentirse amigo

"Amigos son los huevos".
Amigo el perro que mueve su cola,
que te da su cabeza,
que la apoya en tu regazo y tus ojos penetra.

Amiga no es la que fue con vos al boliche esa vez,
ni su amiga, ni sus boluditos amigos,
ni el pelotudo que te dio un pucho para pedirte un beso,
ni la chica que conociste en el baño.

Amigo es estar, es compartir,
es cuidar, proteger,
del mal que nace en uno mismo,
del mal de afuera.

Amigo es comprenderse, amarse,
sobre todas las cosas, respetarse,
confiar, con la verdad como estandarte,
codo a codo y en todas partes.

Amigo no es verse una vez aquel verano,
y no verse nunca más.
Ni dejar esa salida en un "ya será",
ni hablar dos minutos por chat para no quedar mal.

Amigo es creer
en la amistad eterna.
Amigo es estar lejos,
y sentirse hermanos.



sábado, 6 de febrero de 2016

Roja muerte

Se miró las manos,
luego al cielo,
y a su izquierda el muerto,
y los zapatos rojos.

Contuvo el miedo,
el grito que quemaba,
atravesando su pecho,
llegando a su garganta.

Y tembló,
soltó el cuchillo,
se acercó al puente,
miró hacia el fondo.

Sin pensarlo dos veces,
con la culpa en la sien,
se impulsó despacio,
y se dejo caer.